Simulacros no identificados
Mi ventana - Febrero 2017.
“Ya he vivido antes desde la ventana. ”
Ya he vivido antes desde la ventana.
Las razones fueron distintas, pero fue un encierro al fin.
Creo que aquel se sentía más encierro que este. Seguro por ser la primera vez, o porque entonces no disfrutaba tanto la convivencia diaria conmigo. Quizás era más el encierro emocional, atrapada en mi propia mente. Quizás el depender de alguien más para cada uno de mis movimientos. No sé.
Sin importar motivos, hoy entiendo que aquello fue un simulacro para el de hoy. No le extraño ni un minuto, aunque en estos años me ha tentado volver ahí para que esos límites me devuelvan la perspectiva que tan fácil viene y va.
Hoy la ventana no subraya el encierro. Al contrario, enmarca la puerta de un espacio infinito de apertura, para ampliar tantas partes de mí misma que a veces solo con medidas extremas y aislamiento pueden florecer.
Agradezco el simulacro por tantas lecciones aprendidas antes de tiempo. Porque nunca se sabe qué prepara para qué.
Porque aunque los escenarios son nuevos, las herramientas que tenemos se adaptan a ellos. Porque aunque estamos viviendo algo nunca antes visto, ya hemos vivido la adversidad en otro momento, y más importante, hemos sobrevivido a ella.
[Texto #1 - Imágenes & Escritos]
